27 enero, 2011

¿Los conflictos en el Medio Oriente son el resultado del odio hacia Israel?

En una reunión reciente que tuvimos con el Vice Primer Ministro de Israel, Moshe Ya’alon, él tocó un asunto que es ampliamente mal entendido hoy día: ¿Los conflictos en el Medio Oriente son el resultado del odio hacia Israel? La sabiduría occidental dice que lo único que motiva los conflictos en el Medio Oriente son los problemas no resueltos para los palestinos. Por casi una generación, líderes occidentales han discutido que reformas en las naciones árabes, la democracia, derechos humanos, derechos para las mujeres, libertad religiosa, desarrollo económico y el gobierno de ley solo puede ser dirijido después de que sea firmada una paz entre Israel y los palestinos. En este sentido, los autóctratas árabes y sus sujetos reprimidos igualmente se molestan por el aprieto de los palestinos que no pueden ser molestados con sus propias vidas.

Sin embargo, en las Escrituras, leemos acerca de Ismaél y sus descendientes: “Su mano contra todos, y las manos de todos contra él.” (Genesis 16:12)

Lo que más les interesa a los árabes es su propio estilo de vida, su libertad relativa o falta de libertad, y su futuro prospecto. Mohammed Bouazizi, el graduado universitario de Tunisia de 26 años de edad, quien se encendió con fuego el mes pasado después de que las fuerzas de seguridad destruyeran su carreta ilícita, no actuó por Israel. El hombre egipcio quien se encendió con fuego en Cairo el lunes a las afueras del parlamento egipcio, y el hombre algeriano quien se encendió con fuego en Tebessia el día domingo, no escogió ser auto-inmolado en un parque público por su interés en los Palestinos. Igualmente, los manifestantes anti-régimen en Jordania no están haciendo sus manifestaciones porque no hay estado Palestino al occidente del Río Jordán.

La preocupación mayor de los dictadores árabes no es Israel, sino la prolongación de su agarre de poder. Desde su perspectiva, una de las claves para mantener su agarre de acero de poder es neutralizar el apoyo de los Estados Unidos hacia la libertad. En discutir que Israel es la raíz de las patologías árabes, los déspotas árabes ponen a los Estados Unidos en la defensiva. Tener que defender su apoyo por los judíos odiados, los Estados Unidos se siente menos cómodo criticando a los dictadores por su represión de su propia gente. Y como Europa no les importa que pisotéan a los derechos humanos, solamente los Estados Unidos constituya una amenaza a la legitimidad del puño de hierro con la cual estos autóctratas árabes reprimen a su gente.

Debemos entender que el conflicto en el Medio Oriente estuvo presente antes del 14 de mayo del 1948. La única manera en que habrá paz en la Tierra será cuando Mesías regrese a gobernar y a reinar. De Su Segunda Venida, el Profeta Haggeo nos da este mensaje: “En este lugar daré paz, dice el Señor de los ejércitos.”

Mientras esperamos este tiempo glorioso, mantengámonos firmes con la Nación Escogida de Dios ¡y hagamos todo lo posible para propagar este mensaje!